Exposiciones alrededor del mundo, importantes premios y menciones, portadas de revista y libros de su obra, son parte de lo que incluye el extenso currículum del artista español, Juan Francisco Casas Ruíz; como el mismo artista dijo: “no soy solo una cara bonita”. Famoso por crear, con solo una pluma BIC (boli para nuestros amigos españoles), obras a gran escala o de cualquier tamaño, con un detalle minucioso; tan minucioso que se encuentra rápidamente en internet buscando arte hiperrealista y es calificado como tal en demasiadas ocasiones. Sin embargo Juan Francisco nos declara que el no es un artista hiperrealista aunque se base en el realismo al dibujar.
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Su obra no solo es reconocida por su gran detalle y técnica impresionante, sino por su contenido: mucho sexo, mujeres desnudas y momentos de la vida cotidiana que en su mayoría podrían considerarse como “momentos privados e impublicables” y que él enseña a todo el mundo.
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Todo ese contenido, que nos convierte en voyeuristas al descubrirlo, tiene otro detalle más especial: que es su vida. Y voy a sonar como la abuela prematura que soy: ¡vaya vida! Todos son momentos de verdad, son amigos, amantes, conocidos, él mismo como fotógrafo y/o fotografiado; lo que le da un significado más profundo a cada dibujo y te deja pensando no solo en lo bien hecho que está, sino la historia que tiene detrás.
Creador de escenas de amor, pasión, felicidad, diversión y amistad. Momentos hedonistas, felices y fugaces para quién los vive y que algunos conservan solo en el alma o en fotografías escondidas dentro de su computadora. Esos instantes que se vuelven eternos. Que pueden pasar de ser los recuerdos más felices a los más tristes y que tal vez rompieron más de un corazón. Momentos que conforman la esencia de la vida. Incluye además esos instantes de ocio y vanidad que son las “selfies”, que a simple vista son superficiales y banales, pero que tienen una perspectiva diferente a sus ojos.
[See image gallery at blogs.iteso.mx]
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Este artista tiene muchos seguidores, no solo en Instagram y Facebook, sino también personas que intentan dibujar con el mismo estilo y técnica que él. ¿Inspiración o copia? La delgada línea que limita ambos conceptos es traspasada por muchos de ellos.
Siendo tan accesible, barato y común, el bolígrafo BIC es utilizado por muchos artistas y diseñadores para representar ideas. El problema radica cuando se encuentran intentos (malos) de réplica de sus obras. Eso es algo común en la vida del español que no impiden que su trabajo siga siendo reconocido como el mejor y el original, y que los perdone a todos:
Foto: Oscar Araujo
Para todas las personas que admiramos su trabajo y sobre todo que estamos interesadas por el camino del arte, Juan Francisco nos responde una serie de preguntas para conocerlo más, y darnos una idea de cómo piensa un artista de su talla sobre la inspiración y su propia obra:
— ¿Cuándo y cómo fue que decidiste dedicarte de lleno al arte? ¿Tuviste miedo del mito (o realidad) de que es muy difícil vivir de eso?
Siempre tuve interés en el arte, aunque mi vocación primera fue la arquitectura, la aparqué y a la vista está que hice bien. Realmente siempre desde muy pequeño ya andaba dibujando en todos lados, así que supongo que la cosa estaba clara. Cierto que no es fácil vivir exclusivamente del arte; muy pocos podemos decir que lo hacemos, supongo que nunca me lo planteé de verdad, así que nunca me sentí demasiado presionado al respecto.
— ¿Cómo te defines como persona y como artista?
Como persona y como artista lo importante es lo mismo: ser honesto. Cuando uno huye de imposturas y modas y hace lo que quiere desde la tranquilidad que le da el saberse sincero, al final las cosas funcionan y la obra tiene su coherencia. Como persona intento no tomarme demasiado en serio y afrontar la vida con humor, como sabes; y como artista intento reflejar mi vida en mi obra, haciendo de lo cotidiano y lo banal, algo transcendente; del día a día, de lo casual, del humor, del amor, del sexo, una experiencia digna de ser arte.
— ¿ Cómo defines tu obra?
Desde luego, y me adelanto al calificativo tópico, no es hiperrealista. Yo pinto y dibujo partiendo de fotos, sí, pero mi obra busca otras cosas, contar mi vida, lo que me rodea, mi biografía a través de los cuerpos y las caras de la gente que está a mi alrededor, mis amigos, mis amantes, todo. Parto del realismo, porque los detalles son lo que conforman la vida, y estos lo son en tanto que reconocibles, pero no me obsesiono con el acabado fotográfico; me interesa la belleza de lo cotidiano y cómo nos relacionamos con ella, lo surreal de cada día y lo maravilloso del amor y del sexo como hecho trascendente.
— ¿Tienes algún objeto de inspiración (musa)? ¿Qué elementos te ayudan a trabajar mejor? (cómo música, el espacio de trabajo, la limpieza, etc.)
Cualquier cosa me puede inspirar, desde una noche loca, hasta una foto de Pasolini muerto, desde un selfie de una bellísima amiga mexicana, hasta una escultura de Bernini; cualquier cosa en realidad, todo, la vida, es sólo cuestión de querer ver.
— ¿Qué opinión tienes acerca de la inspiración?
Yo creo que es un mito. En realidad el cerebro nunca para de trabajar y procesar información, a veces llega a unas conclusiones y resultados más brillantes que otras y a eso lo llamamos inspiración. Pero la clave es no dejarlo parar nunca y saber discernir entre las mejores ideas. Nada más.
— ¿Cómo te surgen las ideas creativas? ¿Qué haces cuándo se te ocurre alguna idea? (bocetos, apuntes, grabaciones, etc.)
Soy un poco caótico en mi proceso, cuando hago las fotos generalmente improviso y las modelos van colaborando y aportando ideas sobre la marcha, aunque todo es real, todo pasa de verdad, y como en la vida, no hay plan previo y si lo hay, nunca se cumple del todo.
— ¿Qué artistas te inspiran o admiras? (los que quieras).
Muchísimos y muy diferentes. Luc Tuymans, Araki, Frans Hals… hay cientos, miles.
— ¿Qué aconsejarías a alguien que tenga inquietud de desarrollarse en el ámbito creativo?
Algo tan típico y tópico como que trabaje mucho. No hay otra. No perder el buen humor ni la esperanza también ayuda. Si alguien quiere dedicarse al arte de todos modos no le va a quedar más remedio, porque no va a tener otra opción vital. Es como el chiste, aquel del tipo que va al psiquiatra y le dice: “doctor, mi hermano está loco, cree que es una gallina”. Y el doctor responde: “¿pues por qué no lo mete en un manicomio?” y el tipo le dice: “lo haría, pero necesito los huevos”. Así es como Woody Allen define el amor y así veo yo el trabajo de artista, que tiene mucho de amor… por mal que estemos, seguimos, porque necesitamos los huevos.
Fotografías tomadas de: http://www.juanfranciscocasas.com/